La edificación de referencia se sitúa, en una zona de núcleo antiguo donde la tipología de edificación generalizada corresponde a un sistema de muros de carga y forjados unidireccionales, y con una cubierta que adopta una forma curva. Los muros de carga se traban horizontal y verticalmente con elementos de hormigón armado no portantes.
Los forjados se componen de perfiles IPE con un intereje de 84 cm, encima de los cuales existen dos machihembrados cerámicos y una capa de compresión de 4 cm, con emparrillado intermedio. En la última planta, el zuncho horizontal incorpora un voladizo de losa de hormigón armado y recoge las costillas que forman la estructura portante de la cubierta mediante una chapa metálica.
En todo el ámbito de la planta, excepto en la zona dedicada a almacenaje, se reforzó los perfiles IPE 200 existentes mediante la colocación de un perfil adicional IPE 140 entre medio de cada 2 perfiles IPE 200, unido lateralmente a los dos perfiles adyacentes mediante perfiles IPE 140 en cuatro puntos.
Esta solución de refuerzo se articula conceptualmente con la solución existente en el forjado y es una solución de escaso impacto constructivo, al no requerir de la realización de demoliciones en los muros de fábrica de carácter histórico.