Se trata de un edificio residencial de viviendas situado en el municipio de Sant Cugat del Vallés, en Barcelona. El proyecto se configura mediante un bloque de viviendas con geometría en forma de L en planta. El edificio está formado por dos plantas sótano, planta baja y 5 plantas en altura, sin presencia de bajos comerciales. La superficie aproximada del conjunto es de unos 3.600 m2 correspondientes a vivienda y 1.800 m2 a aparcamiento.

La misión de Windmill ha consistido en la redacción del proyecto de ejecución de la estructura del edificio, además de la resolución de la contención y la cimentación.

La estructura se ha resuelto principalmente mediante forjados reticulares de hormigón armado de 25+5 cm para las plantas tipo y losa maciza para los sótanos y la planta ático, donde estaba prevista la construcción de piscinas individuales para cada vivienda. Destaca el juego geométrico de entrantes y salientes de las fachadas, donde aparecen balcones en voladizo resueltos con losas macizas de canto variable.

Con respecto a la estructura vertical, los soportes se han diseñado de hormigón armado de geometría rectangular y circular y pilares metálicos formados por perfiles tipo HEB reforzados con pletinas para las fachadas, con la idea de pasar desapercibidos en las carpinterías exteriores.

Las contenciones, con el objetivo de economizar la solución, se han resuelto con muros pantalla de 45 cm de espesor en el sótano -2 y muros de sótanos encofrados a dos caras para el sótano -1, previa construcción de un talud generalizado en la parcela. La cimentación se ha diseñado mediante zapatas aisladas y combinadas.